En plena vorágine hospitalaria encuentro un hueco para refrescar el deber y el compromiso que me une con CRIATURAS SALVAJES. NUNCA dejaré la web, forma parte de mí, pero son momentos de dedicación y apoyo a un familiar y es por ésto que uno anda un poco desbordado e imposibilitado para mantener la regularidad Criaturil de siempre.
Mi camarada Mr. B, mi amigo y compañero eterno en blogosfera y webzines, no faltó a la cita el lunes pasado con los neoyorkinos TOWER y su CxS, SARABETH LINDEN. Iros poniendo a cubierto porque las balas y los cuchillos afilados forman un fuego cruzado que apesta a NWOBHM y Proto Metal.
En mi ‘retorno’ a esta website que tanto amo, toca arrodillarse y besar una vez más por donde Ann-Sofie Hoyles pisa, toca y ejecuta su ‘Criaturismo’ rockero y exquisitamente retro con sus SPIDERS. ¡Hail Hail Ms. Hoyles!.
Nacidos en la década de los 00’s bajo el influjo del matrimonio formado por Ann-Sofie Hoyles y el experimentado John Hoyles (guitar), miembro originario de Witchcraft y Troubled Horse, la banda no tarda en compactarse con Olle Griphammar (bass) y Axel Sjöberg (drums) (también en Graveyard) poniéndose las pilas en tiempo record pues en pocos meses ya iban a formar parte de uno de los festivales más prestigiosos de Suecia, el Way Out West. La gente flipó en colores con una propuesta retro-vintage, pero contundente ‘a la MC5/Stooges/Motörhead’ rebosante de estribillos y melodías rockeras en la línea de unas The Runaways o Suzi Quatro.
Tras probarse a sí mismos en el estudio con varios singles iniciáticos, la magia no tarda en llegar en plena fiebre efervescente del sonido Vintage Rock 70’s con el reputado productor Don Ahlsterberg (The Soundtrack Of Our Lives, International Noise Conspiracy…) con el que publican su primer ataque en formato E.P., Spiders (2011). Los resultados fueron incluso superiores que los singles iniciales.
Ha llegado la hora de demostrar que pueden defender un LP y Flash Point (2012) fue la confirmación de que estábamos ante un conjunto sólido como una roca e inspirado como la mejor musa, sonaba crudo y melódico a la vez, sonaba retro 70’s a la par que te dominaba con sus expontáneos e implacables riffs, y si a eso le sumamos una frontwoman de bandera con un carisma y una personalidad vocal fuera de serie, ¿qué teníamos?… ¡pues uno de los mejores debuts de esta década!. Nos habíamos rendido ya a la Hoyles y su marido.
Dos años después y con toda la experiencia a sus espaldas llega Shake Electric (2014) que confirma a Spiders como una banda de largo recorrido con un disco de menor crudeza y hostilidad dando más espacios a las melodías y a los ‘classic riffs’ de bandas como Kiss, AC/DC o T. Rex, pero que seguía teniendo unos singles indiscutibles y una cara ‘B’ jodidamente perfecta que los mantiene en lo más alto del Vintage Rock mundial liderando ya multitud de festivales y giras como ‘headliner’.
Tras unos cuantos explosivos singles entre medias en donde se dedican a explorar su ramalazo ABBA y su obsesión por Bad Company y The Stooges, arribó su disco de consagración, Killer Machine (2018), que mantiene en líneas generales la línea del anterior aunque, eso sí, dando cancha cada vez más a las melodías y los estribillos ‘catchy’ como el inicial, aunque fuerte y explosivo, «Shock And Awe». «Killer Machine» y «Like A Wild Child» se han convertido en jodidos ‘highlights’ en sus bolos, explotan la faceta más accesible y comercial de los Spiders, la más cercana al filón ABBA, el primero más contenido y oscuro, el segundo una golosina bailable en toda fiesta rockera que se precie. En definitiva, otra joya de los de Gotemburgo.
Y bien, tras 7 años en el dique seco por motivos que nunca llegué a descubrir (pandemia mediante..), por fin ha llegado la cuarta obra en estudio del matrimonio Hoyles, Sharp Objects (2025).
¿Y qué puedo decir de la nueva colección de canciones de los ‘Arañas’?… ¡¡¡pues que es fabulosa!!!. Nos encontramos muy lejos de la furia y la suciedad de Flash Point (2012), pero todavía rugen con empoderamiento el inicial «Rock’N’Roll Band», «Too Hard For You», «Life Mission», uno de los dos temas cantados por John Hoyles y la furiosa declaración de intenciones, «Love Yourself To Death». Cuatro trallazos de Vintage Rock/High Energy rotundos, sin duda.
El grueso de canciones, sin embargo, se decanta por derroteros claramente Glam y Vintage Powerpop, con un trabajo excelso en melodías tanto vocales como instrumentales, además de unos estribillos setenteros para enmarcar en donde podemos oler y saborear las mieles de T.Rex, Suzy Quatro, Slade o Bad Company entre otros. «Sweet Boy» es una delicia que se te clava en el cerebro y no podrás parar de tararearla, «What’s Your Game (Miss Insane)» te sorprenderá por sus intenciones ramonianas y su efectivo estribillo. «Mess With My Emotions» va un poco por esa línea, pero más calmado y rock’and’rolero con otro estribillo ‘catchy’ jodidamente sublime.
Otra sorpresita de intenciones folkies te la encontrarás en «Valentines», un tema claramente sixties, muy girl groups 60’s y beat sound. El último tema que os descubriré es el adictivo y ultra glammy «Schizoid», con un ritmillo vacilón y sexy hasta la muerte y la llegada de otro estribillo de sobresaliente.
En fin, como podéis intuir por mis palabras, estoy enamorado del retorno de Ann-Sofie Hoyles y sus Spiders. Ha merecido la pena la espera, el pensar que podían haberse separado… y no!, han esperado el tiempo que tenían que esperar para ofrecernos otra colección de joyas que se nutren de la magia de otros tiempos.
En definitiva, el matrimonio Hoyles ya pueden quedarse tranquilos saldando su cuarto álbum como su disco más accesible y enfocado en el Vintage Pop sin perder un ápice de fuerza o arrojo setentero y es que, antes que Elin Larsson (Blues Pills), Marica Svensson (The Black Marbles) y otras diosas vikingas del rock actuales, estaba ya Ann-Sofie (con permiso de Heidi Soldheim y Cecilia Böstrom) dando guerra…
‘BOLA EXTRA’ TO THE PLEASURE FCKING MAX!!!…